LA DESTREZA DE UN OFICIO DE ARTISTAS

« Nuestra profesión es un arte, un oficio de artistas, que se basa en gran medida en compartir y contrastar todo el conocimiento », Vincent Darnajou.

 
  • AUTENTICIDAD

    Para grandes vinos, la versatilidad de lo "hecho a medida"
    y la pertinencia de lo "hecho a mano".

     

    Vincent Darnajou es heredero de una tradición milenaria que se ha convertido en su marchamo. Con este espíritu y el deseo de compartir estos conocimientos, este artesano de corazón ha establecido un nivel de calidad prémium que se ha comprometido a mantener diariamente en la tonelería, apartándose de cualquier proceso de industrialización. "Por nuestra parte, no tenemos más alternativa que adaptarnos para conseguir plasmar, a través de la vinificación y el tostado, todo el esmero que invertimos en nuestras respectivas actividades. La crianza requiere de nuestras dos pasiones para fundirlas en una sola".
    Una filosofía de vida y trabajo que Vincent Darnajou cultiva dando prioridad al diálogo directo con los clientes a través de reuniones y catas, tejiendo fuertes lazos de confianza, casi íntimos, manteniendo una complicidad que, por sí sola, al servicio de su especialidad, permite la capacidad de reacción y de ajuste propia de las cosas "hechas a medida". La reputación de "hecho a mano" que posee la tonelería Darnajou va cobrando valor con el tiempo al ir de boca en boca, prueba suprema e imparcial de la calidad del trabajo del tonelero.
    "Las barricas Darnajou saben dotar de ritmo a los vinos, sin renunciar al estilo clásico", afirman los clientes.

  • LOS ORFEBRES DE LA TRADICIÓN

    La verdadera piedra angular de nuestra empresa
    son los hombres y mujeres que la componen.

    "Tan solo el trabajo en equipo nos puede proporcionar resultados y excelencia", Vincent Darnajou.
    Para transmitir y perpetuar este enfoque decididamente artesanal, personalizado y profundamente humano del oficio de tonelero, Vincent Darnajou se ha tenido que rodear de un equipo de quince personas. Al igual que en los deportes de equipo, al que es aficionado y de los que toma prestados algunos valores, nunca se plantearía desempeñar este oficio en solitario.

    "Para la empresa es esencial promover la expresión de prácticas y conocimientos complementarios, el compromiso y la colaboración".
    Apoyándose en una ambiciosa política de recursos humanos que da preponderancia al valor añadido del individuo, cada tonelero puede expresar su conocimiento, su talento, sus competencias y su personalidad al elaborar sus barricas de principio a fin, hasta el punto de grabar a fuego sus iniciales, como un buen orfebre orgulloso de su trabajo.
    No hay duda de que los amantes de los grandes vinos y, también los ángeles, que según la leyenda, se llevan su parte de los preciados caldos, descubren con cada cata un pedacito del alma del tonelero que se transmite al ejercer su pasión, especialmente en el momento del tostado, como el toque final en una obra de arte.